A Coruña es una ciudad inspiradora, en la que vivieron escritoras como Emilia Pardo Bazán o artistas como Luis Seoane y hoy en día la pasión por el arte y el diseño todavía se respira en sus calles. En ellas nació hace más de un siglo el Picasso artista, cuando el Pablo de 10 años se muda con su familia a la ciudad herculina.
Instituto Eusebio da Guarda, antigua sede Bellas Artes, lugar donde Picasso cursó sus estudios
Era octubre de 1891 cuando la familia Ruiz Picasso llegó a A Coruña procedente de Málaga para instalarse en la calle Payo Gómez, junto a la Escuela Provincial de Bellas Artes, donde el padre de Pablo Picasso ejercería como profesor. Así fue como comenzó la historia de un artista universal.
Una casa convertida a museo
Con su padre José Ruiz y Blasco, y los artistas Román Navarro e Isidoro Brocos como maestros, el joven malagueño comenzó a destacar en las artes plásticas. Actualmente, su vivienda es una Casa-Museo dedicada al artista. En esta, situada en un edificio con galerías de madera que mantiene la estructura original, se pueden observar varias reproducciones de la obra coruñesa de Picasso.
Interior de la Casa Museo Picasso
Fue en esas galerías del segundo piso del número 14 de Payo Gómez donde, junto a su padre, el pequeño Pablo pasaba horas pintando. Hoy en día, la Casa-Museo conserva el caballete y el banco que usaba.
Muy cerca de su hogar se encontraba la entonces Escuela de Bellas Artes, en la que creó su Álbum de La Coruña, una serie de dibujos con lápiz de grafito sobre papel. Actualmente, el edificio ya no ejerce como tal, sino que es el Instituto Eusebio da Guarda. En frente, en la céntrica plaza de Pontevedra, hay una escultura de su Paloma de la Paz, diseñada para el Congreso Mundial de la paz en París de 1948, que recuerda la huella que dejó el artista en el lugar de sus primeros trazos.
Entre sus primeros dibujos se encuentran retratos de las gentes de A Coruña, reproducciones de algunos de los espacios de la ciudad, como la iglesia de San Jorge o un cuadro de su perro, Clíper. Por aquel entonces, Picasso firmaba simplemente como P. Ruiz.
Inspiración en las playas y la Torre de Hércules
De esta época (finales del siglo XIX) destacan obras como un retrato de perfil de su padre, un dibujo de un busto de la Academia o algunos paisajes coruñeses. La playa del Orzán protagoniza alguna de sus pinturas, en uno de los escenarios de la niñez del artista. También de esta etapa es su primera obra maestra, “La muchacha de los pies descalzos”, que se puede ver en el Museo Picasso de París. La identidad de la modelo todavía es desconocida.
Torre de Hércules
Playa de Riazor
Picasso retrató además la Torre de Hércules, el faro más antiguo del mundo todavía en funcionamiento, al óleo sobre una tabla, así como en uno de los periódicos manuales que él mismo realizaba. Maravillado por como la luz del sol se reflejaba sobre el granito del monumento, el padre del pintor rebautizó el faro como “Torre de caramelo” y así titularía una de sus obras el joven malagueño.
La ciudad también marcaría su infancia por la trágica muerte por difteria de su hermana pequeña Conchita, enterrada en el cementerio de San Amaro. Este es uno de los más antiguos de Europa y hoy en día forma parte de su Ruta de Cementerios Singulares. En recuerdo del fallecimiento de su hermana, Picasso retrató en 1895 el “Responso por la muerte de Conchita de Picasso”. Meses después, la familia pondría rumbo a Barcelona.
Cementerio de San Amaro
Las primeras exposiciones de Picasso
El talento del joven Picasso hacía prever un futuro prometedor. La calidad de sus pinturas hizo que pudiera realizar sus primeras exposiciones en A Coruña mostrando sus obras en los escaparates de la Calle Real, la primera de ellas en el número 20, que por aquel entonces era una tienda de muebles.
La respuesta de la crítica no pudo ser mejor. Dos de los diarios de la época, La Voz de Galicia y El Diario de Galicia destacan su talento, que comparan con Giotto, y auguran un “porvenir brillante” para el joven artista.
Calle Real
2023: Año Internacional Picasso
Tras el inicio de su carrera en A Coruña, Picasso se mudó con su familia a Barcelona, donde viviría brevemente antes de ir a Francia, donde pasó la mayor parte de su vida. Ahora, Málaga, Barcelona, París y Antibes, además del Reina Sofía en Madrid o A Coruña, recuerdan la obra y vida de uno de los mayores artistas internacionales del siglo XX.
En diciembre del 2022 la Casa Museo Picasso cumplirá dos décadas desde su apertura en A Coruña y la celebración servirá de antesala al Año Internacional Picasso. El 8 de abril de 2023 se cumplirán 50 años desde la muerte del artista y España y Francia colaborarán en un gran evento internacional conmemorando su obra y su legado.
En la ciudad coruñesa se organizará la exposición ‘Picasso blanco en el recuerdo azul’ en el Museo de Bellas Artes, ‘Universo Picassiano - Homenaje a Pablo Picasso en su etapa coruñesa’ en el Kiosco Alfonso, ‘El Humor habla de Picasso’ en el Encuentro Mundial de Humorismo y el III Congreso Internacional de Arte y Educación en la Fundación Luis Seoane. También habrá un ciclo de conferencias sobre la figura de la mujer en el arte de Picasso, en la ciudad que lo vio nacer como artista.