El Consorcio Provincial de Turismo de León, formado por el Ayuntamiento y la Diputación de León, en colaboración con el Museo Casa Botines y el Palacio Episcopal en Astorga, ha presentado la nueva marca turística “León y Gaudí” y su nuevo logotipo.
Los citados monumentos, son dos de las tres obras que el genial y universal arquitecto Antoni Gaudí proyectó fuera de Cataluña. La finalidad es potenciar la promoción turística, creando un nuevo itinerario cultural en la innovadora ciudad de León, considerada por muchos el mejor destino urbano de España, que se sumará a sus innumerables atractivos.
Gaudí diseñó un edificio de siete plantas inspirado en las construcciones de la burguesía barcelonesa y parisina
En la Plaza de San Marcelo de León, junto al palacio de los Guzmanes, Gaudí proyectó este edificio neogótico y modernista que, originariamente, fue almacén comercial y residencia particular. Se construyó y diseñó entre 1891 y 1892 y en 1969 fue declarado Monumento Histórico de Interés cultural, restaurándose en 1996. Inspirado en el arte gótico medieval, pero con el toque personal de Gaudí, siempre mejorando las soluciones estructurales, fue un encargo de los propietarios de un almacén de tejidos y de una casa de cambio de León. Gaudí diseñó un edificio de siete plantas inspirado en las construcciones de la burguesía barcelonesa y parisina. Tenía una planta baja para el comercio, sótano para almacén, la primera planta o planta noble para la residencia de los propietarios y las plantas superiores para alquiler.
El edificio culmina con una cubierta inclinada a cuatro aguas, donde se alojaban los trasteros y la vivienda del portero. Fue la primera casa de vecinos diseñada por Gaudí y le permitió poner en práctica sus modernas ideas y utilizar por vez primera algunas novedades estructurales y de diseño que después serían constantes en toda su obra.
En 1929, la Casa Botines cambió de propietarios, siendo adquirida por la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de León, que subrogó los contratos de alquiler e instaló en su planta baja las oficinas. En 2017, la fundación Obra Social de Castilla y León, FUNDOS, decidió musealizarla y abrirla al público mostrando cinco siglos de arte con obras de artistas como Francisco de Goya, Joaquín Sorolla, Salvador Dalí o Eduardo Chillida. En su exposición permanente se descubre toda la historia de la Casa Botines.
Premios del Museo Casa Botines
La rehabilitación del edificio, mediante un programa de acondicionamiento consistente en limpieza de la piedra y saneamiento en general del edificio, habilitando un amplio espacio como sala de juntas en los desvanes, fue reconocida con el premio Europa Nostra de Patrimonio Europeo en 1998.
En 2018, recibió el premio al Valor Cultural de Radio TV Castilla y León y tres años después, el Diario de León le otorgó el premio al Desarrollo Social y Valores Humanos.
El Museo Casa Botines Gaudí, obtuvo el premio Castilla y León de las Artes en su edición de 2021, en reconocimiento a su labor como institución privada al servicio de la sociedad y su compromiso con la conservación y difusión del patrimonio, por el desarrollo socioeconómico de la Comunidad y por su apuesta por la innovación en la gestión cultural
En 2022, fue finalista en la elección del Mejor Museo Europeo del Año, en la 45 edición de los premios EMYA “The European Museum of the Year Award”, habiéndose quedado a poca distancia del ganador, el Museum of The Mind, de los Países Bajos. Si bien era difícil conseguir el primer premio porque el museo sólo tenía tres años de trayectoria, su participación, le permitió, además de llegar a la final, dar una gran notoriedad a la marca y una importante proyección tanto al propio museo como a la ciudad. En el mismo año, recibió el reconocimiento TripAdvisor “Travellers Choice”.
La exposición permanente del Museo Casa Botines Gaudí está dedicada a la Historia del edificio, a la figura de Antoni Gaudí y a la colección Fundos. Abarca tres plantas completas del edificio, con más 1500 m2 de superficie
La vinculación inicial de Gaudí con este Palacio surgió de su amistad con el también reusense prelado Don Juan Bautista Grau, quien, tras arder el antiguo palacio en 1886 y estando vacante la plaza de arquitecto diocesano, propuso a Antoni Gaudí su construcción, haciéndose cargo de las obras desde 1889 hasta 1893. El fallecimiento del obispo en aquel año determinó la paralización de las obras por las desavenencias entre Gaudí y la Junta Diocesana, que finalizaron con la renuncia del arquitecto.
Continuó el proyecto el arquitecto Ricardo García-Guereta, concluyendo las obras del 12 de octubre de 1913.
El Palacio Episcopal de Astorga, de cuatro plantas, sobre planta de cruz griega, está construido con granito del Bierzo y es de estilo neogótico
En 1956 se realizaron algunas obras para ser habitado por el obispo de Igualada pero su repentino fallecimiento lo impidió y su sucesor, Marcelo González Martín, decidió residir en el Seminario y destinar el Palacio a ser sede del Museo de los Caminos, que abrió al público en 1964.
La primera planta alberga las distintas dependencias que se organizan alrededor del magnífico espacio central. El esquema de la cerámica vidriada se repite en esta planta a lo largo de sus bóvedas de crucería. Aquí se encuentran la Capilla, el Salón del Trono, el Comedor de Gala y el Despacho y, en los ángulos, los dormitorios
Las chimeneas, probablemente proyectadas por Gaudí, deberían formar, junto con los tres ángeles diseñados por él para remate de la cubierta, un atractivo conjunto que nunca hemos podido admirar. Como consuelo, los tres ángeles con sus atributos episcopales, están colocados en el jardín. El exterior del Palacio se asemeja a un castillo, con almenas, miradores y foso; sin embargo, su interior se parece más a una iglesia. El edificio, se integra perfectamente en el entorno en acertado contraste con la muralla y con la arenisca roja empleada en la Catedral. El foso, uno de los elementos más singulares, fue la solución de Gaudí para llevar luz natural al sótano y el pórtico de entrada, se dice que está inspirado en la Torre Eiffel. En las dos primeras plantas se abren amplios vanos decorados con vidrieras. Gaudí diseñó numerosos capiteles de diferentes estilos para las múltiples columnas del edificio y en la capilla, cada detalle revela la autoría de Gaudí, al igual que la escalera de caracol del torreón noroeste y el comedor. En su interior, el Museo de los Caminos permite ver obras de arte sacro dedicadas a la peregrinación a Santiago de Compostela.
